Humpback Dairy, el mayor productor de leche de camello en los Estados Unidos, ha dejado de enviar leche cruda para consumo humano a través de las líneas estatales. En una carta con fecha del 6 de enero a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), Sam Hostetler, dueño de Humpback Dairy en Miller, Missouri, informó a la agencia que estaba dispuesto a cumplir con un reglamento federal (1240.61) que prohibía el transporte en el comercio interestatal del consumo humano de la leche cruda y productos lácteos crudos (excepto el queso de 60 días).
El 19 de diciembre de 2016, la FDA envió a Hostetler una carta de advertencia en la que declaraba que había violado la reglamentación enviando leche cruda de camello a través de las líneas estatales "en forma acabada para consumo humano." La posición de la FDA es que la prohibición interestatal se aplica a toda la leche cruda incluida la leche de camello.
Hostetler probablemente produjo la mayoría de la leche cruda de camello consumida en Estados Unidos. El cese de sus envíos interestatales ha dejado a miles de personas luchando por una nueva fuente de leche de camello, sobre todo los padres de niños con autismo. Dada la falta de productores de camellos en el país, es probable que muchos de estos padres, al igual que otros, no puedan encontrar otra fuente.
Christina Adams es una profesional de los medios de comunicación y defensora de la leche de camello que vive en California y tiene un hijo con autismo. Durante 12 años ha consultado con médicos y científicos internacionales mientras escribía y hablaba acerca de los beneficios de dar a los niños autistas leche de camello (que ella considera una buena fuente de nutrición para las personas que no pueden tolerar las leches regulares, una condición común en el autismo y los alimentos).
Un informe de Adams sobre los resultados de tratar el autismo de su hijo con leche de camello fue publicado en una revista médica donde muestra los beneficios de la leche cruda de camello. El World Journal of Pharmaceutical Sciences publicó un artículo titulado "Una revisión sobre las propiedades medicinales de la leche de camella", que declaró: "Los niños autistas que beben leche de camello han tenido mejoras sorprendentes en su comportamiento y las dietas." En otra revista médica se declaró que la leche de camello es segura y eficaz para los niños de 3 y se probó para mostrar la eficacia de diversas enfermedades como el autismo, diabetes, alergias a los alimentos, la toxicidad de metales y más.
Según Adams, los beneficios de la leche de camello para muchos niños con autismo son:
• Aumento de la planificación motora, percepción espacial;
• Mayor autodirección, funcionamiento ejecutivo;
• Aumento del lenguaje, a menudo con contenido emocional;
• Aumento de la cognición, conciencia y generalización;
• Mayor empatía;
• Dormir mejor;
• Mayor crecimiento y aumento de peso necesario;
• Resolución de problemas de piel;
• Heces formadas, falta de hinchazón;
• Calma;
• Disminución de los problemas sensoriales;
• Capacidad para tolerar más carbohidratos y azúcares; y
• Disminución de los problemas de comportamiento.
Debido a las regulaciones de salud de los Estados Unidos, es difícil importar leche de camello e importar camellos a este país. Muchos defensores de la leche de camello creen que las regulaciones son demasiado estrictas, pero, al menos en el corto plazo, la mejor esperanza para satisfacer la demanda de leche cruda de camello es la lechería de Hostetler. La carta de advertencia de la FDA puso fin a esa fuente de suministro para las personas fuera de Missouri. La leche de camello pasteurizada y la leche de camello en polvo están disponibles alrededor de los Estados Unidos, pero lo más probable es que la mayoría de los padres que compran leche de camello cruda de Humpback Dairy creen que ninguno de los productos será tan eficaz para mejorar los síntomas de sus niños autistas.
Adams dice: "Leche de camello correctamente pasteurizada todavía tiene un gran valor como fuente de leche alternativa pero leche de camello cruda es una categoría especial que necesita protección. Después de todo, la leche fresca de camello es un alimento que se usa en todo el mundo ".
En particular, un estudio sobre los efectos de la leche de camello sobre el comportamiento en los niños con ASD declaró: "Un efecto terapéutico significativo de la leche de camello en bruto se reduce a la ebullición, incluso en la pasteurización. La leche de camello tiene una buena actividad bacteriana y anti-viral por lo tanto, si se utiliza crudo, hay menos posibilidades de transmisión de la infección. Este concepto es coherente con la creencia de histórico que las sustancias naturales juegan un papel importante en el tratamiento preventivo y terapéutico. " 5
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) informa que los camellos se han convertido en el tercer ganado de mayor crecimiento en el mundo.
Hasta donde se sabe, no hay un único brote de enfermedades transmitidas por alimentos en este país que haya sido atribuido al consumo de leche cruda de camello. La FDA no ha hecho ningún caso de que la leche cruda de camello es una amenaza para la salud pública.
Una vez más, la prohibición de la leche cruda interestatal ha impedido que las personas accedan a lo que creen mejor para su propia salud.
