Tras el lanzamiento de la etiqueta compostable certificada Sinclair T55, la respuesta de la industria ha sido positiva y emocionante, generando interés a nivel global y en las regiones donde fue presentada.
Este lanzamiento se realiza en colaboración con Zespri, quien, como primer adoptante, está en proceso de transición de su programa de etiquetado durante los próximos 12 meses.
Una oportunidad para reducir el plástico en el empaque de productos frescos
Duncan Jones, Gerente Senior de Marketing, comentó: “Estamos presentando Sinclair T55 como una alternativa consciente con el medio ambiente al empaque plástico y a las etiquetas plásticas convencionales.
La demanda de etiquetas compostables para frutas está creciendo, y dado que ofrecemos más de 100 opciones en una variedad de formas y tamaños, Sinclair T55 cumple con los requisitos prácticos de consumidores y minoristas, al tiempo que complementa los programas de sostenibilidad y branding."
Por qué el desempeño al final de su vida útil es clave y el foco principal
Sin prejuicio hacia el material, ya sea papel o film, el desarrollo de productos compostables de Sinclair se centra en el desempeño certificado al final de su vida útil.
Este concepto se define como el proceso en el que la etiqueta se descompone y biodegrada para convertirse en parte de un compost utilizable, ya sea doméstico o industrial, dentro de un plazo específico. Este enfoque asegura que las etiquetas compostables certificadas de Sinclair ofrezcan beneficios clave al alinearse con las leyes actuales y cumplir con los estándares globales de compostaje.
Las etiquetas compostables de Sinclair:
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• Pueden reducir el uso de empaques y desechos plásticos.
Se convierten en parte de un compost natural utilizable, sin impacto negativo en el medio ambiente.
• Pueden desecharse en sistemas de desechos compostables domésticos o industriales sin necesidad de procesos ni acciones mecánicas para garantizar su eliminación o reciclaje seguro.
