La innovación se ha convertido en el motor de crecimiento de la industria alimentaria y Alpina, tras más de 80 años en el mercado de los lácteos, acaba de dar un paso estratégico hacia un nuevo segmento: los Alimentos con Propósito Médico Especial (Apme).
La compañía colombiana presentó recientemente el primer producto líquido de esta categoría elaborado en el país, un hito que responde a tendencias de consumo, cambios demográficos y la creciente preocupación por la nutrición.
En los últimos años, la llamada “comida saludable” ha pasado de ser una moda a convertirse en una necesidad. Los consumidores no solo buscan evitar el sobrepeso, sino también fortalecer la masa muscular, prevenir enfermedades y mantener una mejor calidad de vida a medida que envejecen. Este fenómeno ha impulsado el auge de los suplementos y Apme, productos diseñados tanto para uso preventivo como terapéutico en personas con defensas bajas, problemas de nutrición o condiciones específicas como la diabetes.
Hasta ahora, el mercado colombiano estaba dominado por multinacionales como Abbott, con su reconocido Ensure, y Nestlé, que ofrecían principalmente productos importados. Alpina decidió entrar a competir con una alternativa nacional, luego de adquirir en 2020 a Boydorr, empresa colombiana especializada en nutrición y bienestar. Boydorr ya contaba con un Apme en polvo, pero la meta conjunta fue desarrollar una versión lista para consumir, similar a un yogur o avena, que simplificara la experiencia del usuario.
El proceso de innovación tomó más tiempo del habitual para Alpina: cerca de tres años de pruebas en laboratorio, planta piloto e industrial, con la participación de unas 50 personas entre equipos de Alpina, Boydorr y el Centro Latinoamericano de Nutrición. Los retos técnicos incluyeron la estabilización de la fórmula, la elección de una mezcla proteica adecuada, la reducción de lactosa y el ajuste en grasas para favorecer la salud cardiovascular. Finalmente, a inicios de 2023 se logró el escalamiento industrial y, tras obtener el registro sanitario del Invima en febrero de 2024, el producto fue lanzado al mercado en septiembre del mismo año.
El resultado es Prowhey, una línea de Apme líquidos que incluye presentaciones para consumo general, infantil y para personas con diabetes, con la posibilidad de ampliar el portafolio en el futuro. La principal diferencia frente a la competencia radica en su base tecnológica: Alpina utiliza proteína concentrada de suero de leche, en lugar de soya u otras fuentes vegetales, además de evitar azúcares añadidos y adaptar su mezcla de vitaminas y minerales a cada necesidad.
Aunque la compañía no busca competir en precios, sí apuesta por ofrecer eficacia y calidad, con un producto de larga vida útil (18 meses) en envases Tetra Pak y potencial exportador, especialmente hacia Estados Unidos, donde ya cuenta con permisos de venta.
Más allá del lanzamiento, Alpina proyecta expandir su investigación en alimentos líquidos especializados para distintas enfermedades e incluso para aplicaciones intrahospitalarias. La meta es masificar el consumo de proteína entre mayores de 30 años, dado que a esa edad comienza el proceso natural de pérdida de masa muscular. Con ello, la empresa no solo responde a las tendencias de salud y bienestar, sino también al cambio demográfico que enfrenta Colombia.
“Queremos ofrecer alimentos que combinen nutrición, sabor y accesibilidad, con la vista puesta en el futuro”, concluye Óscar Emir Rincón, director de Innovación de Alpina.