Lo que antes se consideraba un residuo agrícola hoy se transforma en un producto con alto valor agregado. Desde la Región de Aysén, Makus, emprendimiento de los hermanos Carlos y Lucía Soto Salas, avanza hacia la comercialización de un suplemento alimenticio en cápsulas elaborado a partir de hojas de maqui, validado científicamente por su potente capacidad antioxidante y alto contenido de compuestos bioactivos.
La iniciativa cuenta con el respaldo del Comité de Desarrollo Productivo Regional de Aysén (CDPR Aysén), Corfo a través de su programa Súmate a Innovar, y el apoyo técnico del Centro Regional de Estudios en Alimentos Saludables (CREAS).
“Este proyecto nació de una pasión compartida por la ciencia y la naturaleza”, comenta Carlos Soto. “Tras varios años de trabajo, estamos a semanas de presentar el primer suplemento hecho con hojas de maqui. Ha sido un camino desafiante, pero con un propósito claro: ofrecer salud a través de un recurso local”.
El maqui (Aristotelia chilensis) es una planta endémica del sur de Chile, ampliamente conocida por las propiedades antioxidantes de su fruto. Sin embargo, estudios desarrollados por CREAS revelaron que sus hojas poseen incluso mayor capacidad antioxidante, lo que abre nuevas oportunidades para su uso funcional. “Consumidas a diario, pueden contribuir a prevenir el envejecimiento celular. La naturaleza nos entrega un regalo extraordinario y la ciencia lo confirma”, destaca Lucía Soto, bioquímica y cofundadora de Makus.
El desarrollo del suplemento incluyó un exhaustivo proceso de investigación. Se probaron cuatro técnicas de deshidratado y se compararon con el método de liofilización, evaluando tres rangos de temperatura para determinar la mejor relación costo-beneficio. Paralelamente, se trabajó en el etiquetado nutricional, el diseño de envases y un análisis microbiológico que certifica la inocuidad del producto. Las pruebas de estabilidad funcional confirmaron que los antioxidantes y compuestos bioactivos se mantienen intactos en el tiempo, asegurando la calidad de las cápsulas.
Para preservar sus propiedades, el equipo definió encapsular el polvo en cápsulas de gelatina protegidas en frascos de PET ámbar, una solución que combina protección, practicidad y presentación comercial. Esta decisión, respaldada por resultados científicos, permite garantizar al consumidor un suplemento seguro y eficaz.
Makus es uno de los primeros proyectos beneficiados por el CDPR Aysén, organismo creado en 2024 como parte del proceso de descentralización de Corfo. “La implementación del CDPR ha sido fundamental para concretar ideas como Makus, brindando oportunidades reales a emprendedores locales y fortaleciendo el desarrollo regional”, señala Humberto Marín Leiva, director de Corfo Aysén.
En su primera etapa, Makus contempla producir 500 kilos del suplemento, con planes de expansión al mercado nacional e internacional. El modelo de producción incluye prácticas de recolección sustentable que involucran a mujeres y comunidades locales, generando empleo y fortaleciendo la economía regional.
Makus representa más que un producto saludable: es un ejemplo de cómo la innovación, el conocimiento científico y el compromiso con el territorio pueden crear soluciones de impacto global desde el extremo sur de Chile.