En el marco de la Semana de la Gastronomía Sostenible, crece el interés por una cocina que no solo deleita al paladar, sino que también cuida del planeta, los animales y las personas.
Esta efeméride, promovida por la ONU, busca generar conciencia sobre el papel transformador de los sistemas alimentarios. Y en América Latina, la tendencia gana fuerza, con Chile a la cabeza como uno de los países más comprometidos con esta causa.
La gastronomía sostenible se basa en principios simples, pero poderosos: usar ingredientes locales y de temporada, reducir el desperdicio de alimentos, preservar el patrimonio culinario regional y minimizar el impacto ambiental. Pero más allá de las técnicas y los productos, esta corriente invita a repensar nuestro rol como consumidores: ¿somos conscientes de cómo nuestras decisiones alimentarias afectan al mundo?
🌱 Elegir con sentido: lo que hay en el plato importa
Las decisiones cotidianas sobre qué comer pueden contribuir —o no— a un futuro más justo y habitable. Estudios internacionales, como el publicado por el Instituto de Investigación Ambiental de Oxford, señalan que una dieta basada en plantas puede reducir hasta en un 75% las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con la producción de alimentos. Además, disminuye significativamente el uso de recursos clave como el agua y la tierra.
En este contexto, elegir productos certificados con sellos confiables como V-Label se ha vuelto una forma práctica y concreta de alinear la alimentación con los valores ambientales y éticos. Esta certificación internacional, reconocida por millones de personas, garantiza la ausencia total de ingredientes de origen animal, además de exigir altos estándares de calidad y trazabilidad en los productos que la llevan.
🥦 Chile: líder en gastronomía sostenible en la región
Dentro de América Latina, Chile destaca como uno de los países pioneros en la adopción de prácticas de alimentación sostenible y vegana. No solo por el crecimiento del mercado plant-based y la presencia de chefs que reinterpretan la cocina chilena con ingredientes vegetales, sino también por el compromiso institucional. En los últimos años, el país ha impulsado políticas públicas para reducir el desperdicio de alimentos, promover la agricultura regenerativa y fomentar la educación nutricional desde edades tempranas.
Además, Santiago de Chile se ha convertido en un polo gastronómico de referencia para la cocina ética y sostenible, con una creciente oferta de restaurantes certificados, ferias temáticas y proyectos educativos que vinculan alimentación, salud y medio ambiente.
📲 La tecnología al servicio del cambio
V-Label LATAM también se suma a la celebración de esta semana con el lanzamiento oficial de su nueva aplicación gratuita, que permite a cualquier persona ubicar productos veganos certificados en supermercados, tiendas y restaurantes de la región. Esta herramienta digital ya está disponible para dispositivos móviles y facilita la adopción de una alimentación más responsable sin perder sabor ni practicidad.
💚 Cocinar y comer con conciencia
Más allá de modas o etiquetas, la gastronomía sostenible es una invitación a reflexionar: ¿cómo podemos nutrirnos sin dañar? Adoptar esta mirada no implica renunciar al placer de comer, sino enriquecerlo con un propósito más amplio. Hoy, millones de personas en América Latina ya están explorando nuevas formas de cocinar, compartir y consumir con sentido.
En definitiva, celebrar la Semana de la Gastronomía Sostenible es también una oportunidad para reconectar con los valores que están detrás de cada comida: respeto, equilibrio y compromiso con un futuro mejor. Porque cada elección cuenta —y empieza en el plato.