Con motivo del Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, que se celebra cada 7 de junio, el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) de Costa Rica ha lanzado una campaña integral que combina actividades educativas, científicas y de concientización ciudadana.
Esta iniciativa busca fomentar prácticas responsables en la producción, manipulación y consumo de alimentos, fortaleciendo la salud pública y la confianza del consumidor.
La campaña nacional se alinea con el llamado global de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), quienes instauraron esta efeméride para promover la importancia de garantizar alimentos inocuos en toda la cadena alimentaria. En palabras del MEIC, "la inocuidad es un derecho del consumidor y una responsabilidad compartida", por lo que el compromiso debe ser asumido tanto por la industria como por los hogares.
¿Qué significa inocuidad de los alimentos?
La inocuidad alimentaria se refiere a la garantía de que los alimentos no causarán daño al ser consumidos, siempre que se preparen, almacenen y manipulen de manera adecuada. Los riesgos más comunes asociados a la falta de inocuidad incluyen la contaminación bacteriana, el uso indebido de productos químicos, el almacenamiento inadecuado y la manipulación incorrecta de productos perecederos.
Las enfermedades transmitidas por alimentos contaminados pueden tener consecuencias graves, especialmente en niños, personas mayores y pacientes inmunocomprometidos. Por eso, la prevención es clave. De allí las recomendaciones del MEIC para una manipulación segura de alimentos.
Como parte de su estrategia educativa, el MEIC comparte una serie de consejos prácticos orientados a reducir riesgos sanitarios tanto en el hogar como en establecimientos comerciales:
- Lavar adecuadamente las manos, utensilios y superficies de cocina.
- Usar desinfectantes adecuados, especialmente en frutas y verduras.
- Separar alimentos crudos de los cocidos para evitar la contaminación cruzada.
- Cocinar completamente los alimentos, especialmente carnes, huevos y pescados.
- Mantener los alimentos calientes por encima de los 60°C y refrigerar los perecederos por debajo de los 5°C.
- Evitar descongelar alimentos a temperatura ambiente.
- Leer y respetar las etiquetas de los productos, fechas de vencimiento e instrucciones de almacenamiento.
- Estas acciones cotidianas, aunque sencillas, son determinantes para evitar enfermedades transmitidas por alimentos, mejorar la seguridad alimentaria y proteger la salud de todos los miembros del hogar.
Actividades nacionales para fortalecer la educación y la ciencia alimentaria:
La campaña del MEIC contempla una agenda variada de actividades virtuales y presenciales en diversas localidades del país, con el objetivo de generar conciencia desde diferentes frentes:
- 2, 3 y 5 de junio: Charlas presenciales tituladas “Lo que Dice la Ciencia para la Venta de Alimentos 100% Seguros”, organizadas en los cantones de Alajuela y Tibás, dirigidas especialmente a emprendedores y vendedores de alimentos.
- 6 de junio: Minisimposio virtual “Ciencia al Servicio de la Inocuidad”, realizado en conjunto con la Universidad de Costa Rica (UCR), con participación de expertos en microbiología, salud pública y legislación alimentaria.
- 12 de junio: Charla “Inocuidad en Acción” exclusiva para funcionarios del MEIC, como parte de su proceso de actualización institucional en temas sanitarios.
- 13 de junio: Webinar “La Ciencia en Acción”, desarrollado en alianza con la Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (CACIA), orientado a fortalecer las buenas prácticas en empresas del sector.
- Un compromiso país por la salud y la calidad alimentaria
Costa Rica reafirma con esta campaña su compromiso con la educación alimentaria, la ciencia aplicada y la responsabilidad sanitaria. La promoción de alimentos inocuos no solo mejora la salud colectiva, sino que también eleva los estándares del sector alimentario nacional, fortaleciendo su competitividad y sostenibilidad.
El llamado del MEIC es claro, todos los actores —desde productores hasta consumidores— deben asumir su papel en la construcción de un sistema alimentario más seguro, justo y saludable.