Con el objetivo de enfrentar el alza de precios, combatir el desabastecimiento de alimentos y fortalecer la producción nacional, el Gobierno boliviano ha lanzado un paquete de medidas económicas que buscan reactivar el sector agropecuario, con especial énfasis en la industria avícola y cárnica.
Entre las principales acciones destacan la creación de un fideicomiso para pequeños productores, arancel cero para la importación de insumos avícolas, y un ambicioso programa de apoyo a la producción de cereales.
El anuncio fue realizado por el presidente Luis Arce desde la Casa Grande del Pueblo, acompañado por varios de sus ministros. En su mensaje, el mandatario reconoció las preocupaciones de la ciudadanía frente al aumento de precios, la especulación y la escasez de productos básicos, especialmente alimentos de consumo masivo como la carne de pollo y los huevos. “Entendemos la molestia de la población, en particular de los transportistas y de los consumidores. Estas medidas buscan estabilizar los precios, garantizar el abastecimiento y proteger el bolsillo de las familias bolivianas”, expresó.
Fideicomiso para pequeños productores avícolas
Uno de los pilares de este plan es el Decreto Supremo 5398, que establece la creación de un fideicomiso de Bs 22 millones destinado al fortalecimiento del sector productivo agrícola, con especial atención al sector avícola. Esta iniciativa busca mejorar la infraestructura de producción de aves, permitiendo a los pequeños productores acceder a financiamiento para modernizar galpones, adquirir equipamiento, mejorar sistemas de bioseguridad y optimizar la crianza de pollos y gallinas ponedoras.
Yamil Flores, ministro de Desarrollo Rural y Tierras, señaló que esta medida permitirá dinamizar la producción cárnica de origen avícola, incrementar los niveles de oferta y reducir la dependencia de insumos encarecidos en el mercado internacional. “El fideicomiso busca garantizar la producción de proteína animal asequible y de calidad, fundamental para la dieta de los bolivianos”, explicó.
Arancel cero para insumos avícolas y cárnicos
El Decreto Supremo 5401 complementa esta estrategia al establecer un gravamen arancelario cero hasta el 31 de diciembre de 2025 para una serie de productos esenciales en la cadena de producción avícola. Esto incluye la importación de pollitos bebés, vacunas, vitaminas, aditivos sanitarios y otros insumos veterinarios necesarios para garantizar la sanidad y productividad de las aves.
Con esta medida, se busca reducir los costos de producción, estabilizar la oferta de carne de pollo y huevos en el mercado interno, y contener el aumento de precios que ha afectado a millones de hogares. Esta reducción arancelaria también beneficiará indirectamente al sector cárnico en general, al liberar recursos que podrán ser reinvertidos en infraestructura y mejoras tecnológicas.
Apoyo a la producción de cereales: base para la industria cárnica
El Programa Nacional de Apoyo a la Producción de Cereales, que cuenta con una inversión de Bs 350 millones para los próximos cinco años, constituye el tercer componente clave del paquete de medidas. Este programa busca aumentar el rendimiento y reducir las pérdidas en cultivos como maíz, sorgo y soya, que son fundamentales para la alimentación del ganado avícola y porcino.
Una producción nacional más robusta de estos insumos permitirá reducir la dependencia de importaciones, asegurar la provisión de alimentos balanceados a precios accesibles y sostener una producción cárnica más competitiva.
Hacia una industria cárnica más resiliente y soberana
Las medidas anunciadas representan un paso significativo hacia la soberanía alimentaria del país, fortaleciendo las capacidades de los productores locales y protegiendo a los consumidores frente a la especulación y la volatilidad internacional. En un contexto marcado por desafíos climáticos, alza de costos logísticos y presión inflacionaria global, estas acciones reafirman el compromiso del Gobierno con una producción cárnica nacional fuerte, sostenible y socialmente justa.
Si bien el camino hacia la autosuficiencia alimentaria requiere esfuerzos continuos y coordinación multisectorial, estas decisiones sientan una base sólida para una industria avícola y cárnica más moderna, eficiente y centrada en el bienestar de la población boliviana.