FoodNewsLatam - PepsiCo impulsa una nueva era de bebidas bajas en calorías en México

PepsiCo impulsa una nueva era de bebidas bajas en calorías en México

México Bebidas

PepsiCo y su embotelladora GEPP anunciaron un ambicioso reforzamiento de su estrategia de reformulación en México, alineada a una tendencia global que busca reducir el consumo de azúcares añadidos y ofrecer opciones más saludables sin sacrificar sabor ni experiencia.

La compañía informó que para el año 2030, la gran mayoría de su portafolio de bebidas estará conformado por productos con menos de 20 calorías por cada 100 mililitros, una meta que marca un nuevo estándar dentro de la industria mexicana y latinoamericana.

Este anuncio se produce en un momento clave para el sector: el país avanza hacia políticas regulatorias más estrictas, como los incrementos en impuestos a las bebidas azucaradas y el fortalecimiento de etiquetados que orientan al consumidor hacia elecciones más informadas. Ante este escenario, las empresas de bebidas se ven impulsadas a acelerar la innovación, y PepsiCo se posiciona como uno de los actores que ha decidido adelantarse a estas exigencias mediante una estrategia que combina reformulación técnica, comunicación responsable y nuevos modelos de empaque.

La empresa destacó que su portafolio ya ha logrado una reducción considerable en el contenido calórico gracias a un plan sostenido de innovación que ha transformado la composición de la mayoría de sus marcas emblemáticas. El enfoque se centra en dos líneas de acción: ampliar el número de productos reducidos y sin calorías, y facilitar su adopción entre los consumidores a través de una comunicación clara, con responsabilidad publicitaria y sin involucrar a menores de edad en campañas vinculadas a bebidas saborizadas. Asimismo, la compañía reforzará la disponibilidad de presentaciones individuales, alineándose con los cambios en hábitos de consumo y con las recomendaciones de control de porciones vigentes en el sector salud.

Este esfuerzo de reformulación no es nuevo, pero se ha acelerado de manera notable en los últimos años debido al contexto regulatorio. De acuerdo con PepsiCo, su portafolio de bebidas ha experimentado una transformación profunda que abarca desde el desarrollo tecnológico hasta la actualización de estándares internos más estrictos que los exigidos por el propio mercado. La compañía sostiene que, pese a las modificaciones en el contenido calórico y en el perfil nutricional, se mantiene intacta la experiencia sensorial que los consumidores esperan, un reto que ha demandado innovación en sabor, edulcoración y estabilidad de formulaciones.

En el ámbito industrial, estas acciones implican una reorganización significativa: procesos de reformulación a gran escala, inversión en investigación, adecuación de líneas de producción y ajustes logísticos. Para la industria mexicana de bebidas, este movimiento no solo eleva el nivel competitivo, sino que también abre la puerta a un portafolio más acorde con las expectativas de un consumidor que demanda alternativas más saludables, prácticas y transparentes. Este tipo de transformaciones plantea nuevos retos, pero también nuevas oportunidades para diversificar categorías, diferenciar marcas y crear valor en un entorno regulatorio cada vez más complejo.

Desde una perspectiva de salud pública, la transición hacia bebidas con menor contenido calórico representa un avance relevante. México enfrenta desafíos en materia de consumo de azúcares y enfermedades asociadas, por lo que la reducción gradual y sostenida de calorías en productos de alta penetración contribuye a mejorar el panorama general y a promover hábitos más equilibrados. En este sentido, el compromiso de PepsiCo suma a un esfuerzo colectivo de la industria que busca alinearse con metas de bienestar y nutrición impulsadas por organismos nacionales e internacionales.

El anuncio también refuerza la postura de PepsiCo como líder en la agenda de responsabilidad corporativa del sector. La compañía subrayó que todas sus marcas clave ya han pasado por procesos de reformulación y que su objetivo es mantener un ritmo de transformación constante, asegurando que cada presentación y cada canal de venta se adapten a esta nueva etapa. Para PepsiCo y GEPP, el mensaje es claro: la evolución del portafolio no es una tendencia pasajera, sino un compromiso de largo plazo con la salud del consumidor y con el futuro de la industria mexicana de bebidas.

|