La provincia de Santa Fe emitirá las Alertas Alimentarias Nº 08, 09 y 10/2025, un llamado de atención que trasciende lo local y vuelve a poner en foco un problema estructural que afecta a toda la industria de alimentos y bebidas en Argentina.
La presencia de productos importados que ingresan al mercado sin cumplir la normativa nacional, con rotulados irregulares o directamente falsificados. Este tipo de infracciones no solo vulnera la protección del consumidor, sino que también afecta la competitividad de la industria formal, que debe operar bajo estrictos estándares sanitarios y regulatorios.
Las alertas se activan luego de que la Agencia Provincial de Seguridad Alimentaria (APSA) detectara, en distintos procedimientos de control, una serie de productos —principalmente fideos instantáneos y galletitas importadas— que incumplen requisitos básicos exigidos por el Código Alimentario Argentino (CAA), la Ley 18.284 y las normativas vigentes en materia de rotulación, trazabilidad y autorización sanitaria.
Los productos observados y sus irregularidades
Los análisis de laboratorio y actas de muestreo revelaron irregularidades reiteradas en productos de la marca “Kang Shi Fu”, así como en galletitas dulces importadas bajo la marca “Disney Mickey Mouse”. Entre los principales incumplimientos se identificaron:
Fideo instantáneo sabor a pollo con champiñón (100 g): ausencia de Registro Nacional de Establecimiento (RNE) y Registro Nacional de Producto Alimenticio (RNPA).
- Sea Food Soup Noodle (98 g): rótulo sin información obligatoria en idioma español.
- Sopa de Fideos sabor cerdo artificial con echalote frito (108 g): CUIT declarado inexistente y falta de RNE y RNPA.
- Soup Noodle Artificial Beef Flavor con vegetales encurtidos (117 g): rótulo sin información en español.
- Galletitas “Butter Cookies”, marca Disney Mickey Mouse: ausencia total de información obligatoria en español pese a estar destinadas al consumo local.
- Producto sin denominación de venta (Acta Nº 20404): rótulo sin registros y sin información en español.
Estos incumplimientos no son menores: la normativa argentina exige que todo alimento comercializado dentro del país tenga rótulos en español, identifique claramente el establecimiento elaborador, el importador autorizado, el número de registro sanitario, la composición, los alérgenos, el lote, la fecha de elaboración y vencimiento, y toda la información indispensable para garantizar la inocuidad y trazabilidad.
Impacto en la industria argentina de alimentos y bebidas
El anuncio de Santa Fe tiene relevancia nacional porque expone un desafío persistente: el ingreso de productos importados que compiten de manera desleal con la industria formal. Cuando un alimento ingresa sin el debido registro o con rotulado falsificado, los fabricantes locales quedan en desventaja a pesar de cumplir con controles estrictos, inspecciones periódicas, inversión regulatoria y procesos de certificación.
Además, estos productos ilegales pueden vulnerar acuerdos comerciales y afectar la percepción de los consumidores respecto de la calidad de los alimentos importados. Para la industria argentina —que representa cerca del 30% del PBI manufacturero y es uno de los sectores más regulados del país—, el cumplimiento normativo no es solo un requisito, sino un valor competitivo que sostiene la confianza del mercado interno y las exportaciones.
Una señal fuerte para el sistema regulatorio
La decisión de prohibir la tenencia, elaboración, transporte, comercialización y exposición de estos productos en toda la provincia refuerza el rol de los organismos de control. La APSA recuerda que verifica permanentemente que los alimentos cumplan la legislación vigente, que los rótulos informen de forma clara y en español, y que la información sea veraz y comprobable. Estas medidas buscan garantizar la seguridad alimentaria y brindar herramientas a los consumidores para tomar decisiones informadas.
Para la industria, es un recordatorio contundente: la trazabilidad, la transparencia y el cumplimiento normativo siguen siendo pilares esenciales para competir en un mercado cada vez más exigente.