Con la sofisticación de los transportadores de última generación, el mantenimiento proactivo, preventivo y predictivo es una estrategia efectiva para la industria de alimentos y bebidas en América Latina.
Este es el caso de los transportadores de arrastre tubulares, que mueven suavemente el producto a través de un tubo sellado utilizando un cable de arrastre de acero inoxidable flexible y recubierto que se pasa por un bucle. Los discos circulares sólidos (pasos) están unidos al cable, y empujan el producto a través del tubo sin el uso de aire.
Aunque es posible utilizar terceros para instalar los sistemas y equipos de mantenimiento internos para su cuidado, involucrar a un supervisor del Fabricante del Equipo Original (OEM, por sus siglas en inglés) tiene ventajas considerables, ya que posee capacitación y experiencia inigualables en el sistema.
Los técnicos OEM suelen tener años de experiencia exclusivamente en el mantenimiento y resolución de problemas de transportadores de arrastre tubulares. Nuestros técnicos han realizado cientos de inspecciones en plantas de todo el mundo que procesan cualquier material imaginable, desde polvos y mezclas hasta semillas para pájaros, alimentos para mascotas, cereales, granos de café, frutos secos y más.
“Muchos problemas recurrentes surgen de una instalación incorrecta, que puede implicar una mala colocación de los soportes del transportador, tensión excesiva, desalineación de los tubos, dejar espacios vacíos o soportes insuficientes. Todos estos defectos pueden generar fricción, ruido y desgaste prematuro de las piezas, lo cual obligará a un reemplazo”, afirma Fernando Mejía, Director de Gestión del Ciclo de Vida del Producto y Mercado de Posventa de Automated Handling Solutions (AHS).
Un OEM también puede recomendar de forma proactiva los kits de repuestos adecuados o piezas de alto desgaste, como cables, conectores o cepillos, que se sabe que tienen ciclos de vida más cortos. Este método abarca la evaluación tanto del estado como del uso del transportador, al mismo tiempo que aprovecha los datos predictivos para resolver de manera eficiente numerosos problemas antes de que ocurra cualquier tiempo de inactividad.
Como OEM, podemos analizar el uso del sistema, así como el desgaste de los componentes y los datos del ciclo de vida para predecir con precisión cuándo es probable que sea necesario reemplazar piezas vitales y hacer el respectivo reemplazo antes de que algo se rompa, dice Mejía.
Cuanto más se adhiera un procesador a este tipo de programa de mantenimiento preventivo total, es más probable que los transportadores brinden un servicio óptimo durante toda su vida útil prevista", agrega Mejía.
Es muy recomendable una inspección anual exhaustiva del sistema transportador por parte del OEM. Dada la escasez de mecánicos capacitados, combinado con la alta rotación de empleados, estamos aquí para realizar inspecciones en profundidad y el mantenimiento recomendado. Esta solución está dirigida principalmente a procesadores que cuentan con uno o varios transportadores de arrastre tubular funcionando constantemente durante todo el año.
La detección de problemas como espacios vacíos o desalineaciones requiere una inspección con cámara. La inspección anual también evalúa los tubos, paredes, cepillos, conectores, entradas y salidas del transportador. Además, se debe revisar la integridad y tensión de los cables, el desgaste de los discos y ruedas dentadas, y se deben validar las uniones.
Durante el proceso de inspección, el OEM puede recalibrar o reemplazar cualquier componente que se encuentre fuera de las especificaciones del sistema. En el caso de AHS, los técnicos de servicio también asesoran sobre el uso de cualquier kit de actualización o modernización disponible que pueda facilitar aún más el aumento de la producción.
Aunque la frecuencia de las visitas de servicio anuales depende de la aplicación del sistema y de las condiciones ambientales, varios factores pueden ayudar a determinar la frecuencia óptima. Como lista parcial, esto puede incluir el tipo de sistemas transportadores en las instalaciones, la longitud y complejidad del sistema, el uso diario promedio, las condiciones ambientales y el tipo de material transportado. Cuando se analizan estos factores, se puede programar la visita de servicio para una o dos veces al año.
Muchos procesadores pueden beneficiarse enormemente de la colaboración con un OEM experto en transportadores para establecer un plan integral de mantenimiento preventivo.
Para satisfacer las demandas de la industria y abordar los servicios solicitados, AHS está aumentando su capacidad de servicio para ayudar a los procesadores a mitigar los problemas de manera proactiva y minimizar el tiempo de inactividad. El OEM ahora ofrece acuerdos de servicio a largo plazo que cubren de manera integral todos los aspectos del mantenimiento, para que el procesador pueda concentrarse en su negocio principal con confianza.