El Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) de las Naciones Unidas está intensificando sus esfuerzos para facilitar la participación del sector privado en el desarrollo rural. Al otorgar un préstamo de 2,5 millones de dólares a Hamkorbank, un banco comercial líder en Uzbekistán, 1.500 productores lácteos y hortícolas de bajos ingresos podrán acceder a microcréditos para aumentar sus ingresos y mejorar sus medios de vida.
“Cuando los pequeños productores acceden a financiación, vemos efectos dominó positivos. Estamos luchando contra la pobreza, impulsando el desarrollo rural y brindando una amplia gama de oportunidades económicas donde más se necesitan”, afirmó Laura Mattioli, Directora del FIDA en Uzbekistán.
“La labor del FIDA se centra especialmente en apoyar a las mujeres y los jóvenes en su lucha por tener igualdad de acceso a los activos productivos. Aproximadamente el 30 por ciento de la microfinanciación se prestará a mujeres; y el 30 por ciento estará disponible para adultos jóvenes menores de 30 años”, añadió Mattioli.
La colaboración aborda el acceso a la financiación, uno de los desafíos que enfrentan muchos de los cinco millones de hogares rurales uzbekos que dependen de la agricultura para obtener sus ingresos. Para las pequeñas explotaciones con un promedio de 0,2 hectáreas, o Dehkans, como se las conoce localmente, el apoyo financiero ha sido históricamente percibido como demasiado arriesgado por los pocos bancos comerciales que operan en el sector financiero nacional.
“Es un honor para nosotros asociarnos con el FIDA y alinear nuestros esfuerzos hacia el desarrollo agrícola, ya que la industria está creciendo exponencialmente en Uzbekistán.
Este apoyo empoderará a los agricultores de bajos ingresos y les ayudará a ampliar sus negocios. También refuerza el papel de Hamkorbank como aliado financiero confiable, fomentando la confianza y la lealtad entre nuestra clientela. Esperamos una mayor colaboración para impulsar el progreso económico en el sector agrícola de Uzbekistán”, dijo Khan Alexander, Director del Departamento de Actividades Económicas Exteriores de Hamkorbank.
“Con este primer préstamo del FIDA a un socio privado en la región, pretendemos mejorar los ingresos, la seguridad alimentaria y la resiliencia de los pobres de las zonas rurales y de los pequeños productores. Asociarse con Hamkorbank también es un paso clave para demostrar a los mercados financieros que apoyar a los pequeños productores es sostenible”, afirmó Thouraya Triki, Directora de Producción, Mercados e Instituciones Sostenibles del FIDA.
Una cuarta parte del PIB de Uzbekistán proviene de los sectores agrícola, forestal y pesquero, que también emplean a uno de cada cuatro trabajadores. La mitad de la creciente población de Uzbekistán, la mayor de Asia Central, vive en zonas rurales (alrededor de 18 millones de personas), incluido el 75 por ciento de la población de menores ingresos.
Con este préstamo, Hamkorbank también apoyará a las micro, pequeñas y medianas empresas rurales que brindan valiosos servicios, tecnología y acceso al mercado a las comunidades rurales uzbecas en las regiones de Andijan, Fergana, Jizzakh, Kashkadarya, Namangán, Samarcanda y Surkhandarya.
El préstamo del FIDA se basa en una inversión anterior del Fondo de las Naciones Unidas destinada a desarrollar cadenas de valor lácteas. Los próximos microcréditos llegarán a aquellos productores y organizaciones lácteos que necesitan aumentar sus inversiones, incluso mediante la compra de ganado, equipos e insumos alimentarios, y diversificar sus ingresos expandiéndose a la horticultura.
