Reducir el consumo de carne en un 50% es esencial para los objetivos climáticos y la salud pública de Francia.
La organización de sensibilización alimentaria, ProVeg International, acoge con satisfacción la publicación de un estudio realizado por la Red Francesa de Acción Climática (Réseau Action Climat) y la Sociedad Francesa de Nutrición (Société Française de Nutrition), que arroja luz sobre la necesidad crítica de reducir el consumo de carne para combatir el clima. cambiar.
El informe, “Cómo reconciliar la nutrición y el clima” (“Comment concilier nutrición et climat?”), encontró que reducir el consumo de carne en un 50% es necesario para que Francia alcance sus objetivos climáticos y mejoraría la salud de la población. Dado que casi una cuarta parte de las emisiones de Francia provienen de la producción de alimentos y un asombroso 80% de las emisiones agrícolas se atribuyen a la cría de ganado, el estudio destaca la enorme contribución de la ganadería francesa al cambio climático.1
“Este informe es una excelente contribución a la investigación sobre el papel que desempeña la ganadería en el cambio climático. A nivel mundial, la ganadería representa alrededor del 20% del total de las emisiones globales de gases de efecto invernadero,2 por lo que es una cuestión que debe considerarse en cualquier debate político”, afirmó Jasmijn de Boo, director ejecutivo global de ProVeg International.
Francia ya se ha comprometido públicamente a reducir sus emisiones agrícolas en un 46% para 2050, y las recomendaciones del estudio sobre ganadería y ganadería proporcionan una excelente hoja de ruta para la acción gubernamental.
El nuevo estudio afirma que la población francesa consume el doble de carne que el promedio mundial, pero los modelos realizados por el equipo de investigación revelan que es posible reducir a la mitad el consumo de carne sin recurrir a productos enriquecidos o suplementos.
El estudio encontró que reducir los productos animales mientras se hace la transición a una dieta rica en frutas, verduras, legumbres, nueces y cereales integrales permite a las personas satisfacer las necesidades nutricionales y al mismo tiempo mitiga el riesgo de ciertas enfermedades.3 Además, tales cambios en la dieta disminuirían significativamente la Huella ambiental asociada a la producción de alimentos.
“En una encuesta de ProVeg y Smart Protein de 2023, más del 58% de los encuestados franceses informaron que ya están reduciendo su consumo de carne e incorporando más alimentos de origen vegetal a sus dietas, principalmente por razones ambientales y de salud. El nuevo estudio lo reafirma y espero que los responsables políticos franceses sigan sus orientaciones”, afirmó de Boo.
