Kraft Heinz, uno de los gigantes de la industria alimentaria mundial, ha anunciado un paso estratégico hacia una oferta más saludable y transparente: eliminará por completo los colorantes artificiales de todos sus productos vendidos en Estados Unidos antes de que finalice el año 2027.
Esta decisión forma parte de una transformación más amplia en la compañía, que busca responder tanto a la presión regulatoria como a una nueva demanda del consumidor.
El anuncio, realizado este martes por el presidente de Kraft Heinz North America, Pedro Navio, también incluye el compromiso de no lanzar ningún nuevo producto que contenga colorantes sintéticos. “La gran mayoría de nuestros productos ya utilizan colorantes naturales o no llevan ningún tipo de color. Venimos trabajando desde hace tiempo para reducir al mínimo el uso de aditivos artificiales en nuestro portafolio”, afirmó Navio.
Kraft Heinz, conocida por marcas como Kraft Mac & Cheese, ketchup Heinz, Jell-O y Capri-Sun, había comenzado este proceso en 2016, cuando retiró los colorantes artificiales de su emblemático Mac & Cheese. Ahora, la decisión se amplía a la totalidad de sus productos, convirtiéndola en una de las primeras grandes compañías estadounidenses en adoptar este compromiso a gran escala.
Un cambio impulsado por la regulación y las tendencias de consumo
El anuncio llega en un contexto de creciente escrutinio sobre los aditivos sintéticos en alimentos. Diversas investigaciones y organizaciones de salud pública han señalado posibles riesgos para la salud asociados a estos compuestos, como alteraciones neuroconductuales en niños y una potencial relación con ciertos tipos de cáncer.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA) ya comenzó a tomar medidas. En enero de 2025, prohibió el uso del colorante Rojo N° 3 en alimentos y medicamentos. En abril, anunció un plan para trabajar junto con la industria alimentaria en la eliminación progresiva de los tintes sintéticos derivados del petróleo. En palabras del comisionado adjunto de la FDA, Jim Kennedy, estos colorantes fueron definidos como “compuestos tóxicos”.
Además, varios estados ya han comenzado a legislar por su cuenta. California, Virginia y Virginia Occidental han prohibido ciertos colorantes artificiales, y más de la mitad de los estados estadounidenses —independientemente de su color político— están considerando medidas similares, según el Environmental Working Group, una ONG especializada en salud ambiental. Para Kraft Heinz, adelantarse a esta ola legislativa parece tanto una decisión de cumplimiento como una jugada estratégica.
Reestructuración corporativa y posible reconfiguración del grupo
Este anuncio se produce en medio de una etapa de cambios en la cúpula directiva y en la estructura de negocios de Kraft Heinz. Recientemente, la compañía confirmó que los dos representantes de Berkshire Hathaway en su junta directiva dejarán sus cargos. Esta decisión marca el fin de la presencia directa del conglomerado de Warren Buffett en la gobernanza de la firma, a pesar de haber sido uno de los principales arquitectos de la fusión entre Kraft Foods y H.J. Heinz en 2015.
La empresa también ha emprendido una serie de desinversiones en los últimos años, entre ellas la venta de la marca de frutos secos Planters y su negocio estadounidense de quesos naturales. Analistas del sector consideran que estas medidas apuntan a una simplificación del portafolio y a fortalecer las marcas centrales que se alinean con las nuevas tendencias de consumo: más saludables, naturales y sostenibles.
Los expertos no descartan que Kraft Heinz pueda buscar una fusión o alianza estratégica en el futuro cercano, especialmente en un contexto donde los gigantes del sector se ven presionados a adaptarse a un nuevo tipo de consumidor más informado y exigente.
Una señal al mercado
Con esta iniciativa, Kraft Heinz no solo busca cumplir con las nuevas normativas, sino también posicionarse como líder en responsabilidad alimentaria dentro del sector de alimentos envasados. La decisión podría empujar a sus competidores a acelerar sus propios procesos de eliminación de aditivos artificiales, en una carrera que ya no es solo comercial, sino también ética y sanitaria.
En un mercado cada vez más enfocado en la transparencia, la salud y la sostenibilidad, Kraft Heinz apuesta por renovarse desde adentro. Y este podría ser solo el comienzo de una transformación más profunda que marque el rumbo de la industria en los próximos años.