Para apoyar los esfuerzos de Somalia por abordar los efectos de décadas de conflicto, degradación ambiental e infraestructura y productividad agrícola con fondos insuficientes, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Gobierno de Somalia han firmado un nuevo acuerdo financiero para financiar el Programa de Resiliencia de los Medios de Vida Rural. (RLRP).
El nuevo programa RLRP, valorado en 31,22 millones de dólares, mejorará la vida de los pequeños agricultores rurales al aumentar su productividad, sus ingresos y su seguridad nutricional de manera sostenible. Esta iniciativa marca la primera inversión directa del FIDA en Somalia tras la liquidación de los atrasos del país con el fondo durante el Consejo de Gobernadores del FIDA de 2023.
“El desarrollo rural en Somalia enfrenta numerosos desafíos, derivados de décadas de conflicto, degradación ambiental, infraestructura limitada, además de ciclos de sequía e inundaciones”, dijo Álvaro Lario, Presidente del FIDA. "Es muy importante aumentar nuestra inversión en Somalia en este momento de aumento del cambio climático para garantizar que los más pobres y vulnerables de las zonas rurales no se queden atrás".
El objetivo del proyecto es abordar los complejos desafíos del sector agrícola de Somalia. Se centra en abordar la escasez de agua agravada por el cambio climático a través de inversiones en infraestructura hídrica comunitaria, vital para las actividades agrícolas. Además, pretende aumentar la productividad agrícola actualizando los métodos agrícolas, mejorando el acceso a los mercados y ofreciendo apoyo financiero a lo largo de las cadenas de valor de los cultivos y la ganadería.
Reconociendo el debilitamiento de las estructuras de gobernanza debido a los disturbios a largo plazo, el proyecto enfatiza el desarrollo de capacidades y el desarrollo de políticas basadas en evidencia para reforzar los marcos institucionales. Se alinea con las prioridades del FIDA, incorporando financiación climática, sensibilidad nutricional e inclusión de los jóvenes, aprovechando la experiencia del FIDA para promover el desarrollo liderado por la comunidad.
"El programa es de vital importancia para Somalia y pretende transformar los medios de vida rurales a través de una agricultura resiliente al clima", dijo Mohamed A. Hayir, Ministro de Agricultura e Irrigación de Somalia.
"Ayuda a equipar a los pobres de las zonas rurales con habilidades y empleos para lograr la seguridad alimentaria y la prosperidad a pesar de los desafíos del cambio climático".
El proyecto tiene como objetivo llegar a 30.000 hogares somalíes durante 8 años y al mismo tiempo dar prioridad a los grupos más vulnerables, en particular mujeres y jóvenes, que enfrentan mayores riesgos debido al cambio climático y los desafíos relacionados con los conflictos. Al dirigir las iniciativas de capacitación a grupos comunitarios, incluidos mujeres y jóvenes, el proyecto pretende mejorar la apropiación, la sostenibilidad y la gestión de conflictos, con un objetivo de beneficiarios del 50% de mujeres y del 40% de jóvenes.
Además, se centra en reforzar la resiliencia de la comunidad mejorando la infraestructura, beneficiando a 12.000 miembros de grupos comunitarios, mejorando el acceso al agua para 54.000 personas y brindando capacitación sobre operación y mantenimiento a 6.000 personas. Además, el apoyo a los medios de vida de los pequeños agricultores incluye capacitación en nuevas tecnologías, servicios de desarrollo empresarial para empresas rurales y apoyo nutricional para 27.000 personas, lo que en conjunto beneficia a 18.000 personas directa e indirectamente.
Gracias a las generosas contribuciones de Bélgica, Alemania, Italia y Suecia, Somalia saldó su deuda con el FIDA. Esta deuda impidió que Somalia recibiera préstamos y donaciones en condiciones muy favorables del FIDA desde 1991, al mismo tiempo que la guerra civil devastaba el país.
Los principales acreedores han decidido formalmente aumentar las inversiones para el desarrollo confirmando en marzo de 2020 la elegibilidad de Somalia para la iniciativa de Países Pobres Muy Endeudados (PPME). Esta iniciativa tiene como objetivo ayudar al país a saldar sus atrasos de deuda y avanzar hacia una mejor trayectoria económica y socioeconómica.
El RLRP es el primer proyecto en Somalia financiado directamente con cargo a los recursos básicos del FIDA después de la decisión del Consejo de Gobernadores del año pasado de cancelar los atrasos del país con el fondo. Una vez saldada su deuda con el FIDA, Somalia obtuvo acceso a recursos cruciales, lo que le permitió al FIDA comprometer financiación a través del sistema de asignación basado en el desempeño.
“Somalia pudo implementar reformas rigurosas y alcanzar el punto de culminación de la iniciativa HIPC en diciembre de 2023”, dijo Bihi Egeh, Ministro de Finanzas de Somalia. "Agradecemos a nuestros acreedores y socios de desarrollo por liquidar los atrasos de Somalia y brindar asistencia financiera para apoyar la resiliencia y el crecimiento del país".
A pesar de los atrasos y las suspensiones de préstamos, el FIDA ha canalizado aproximadamente USD 40 millones a Somalia desde el decenio de 1990 a través de proyectos financiados mediante donaciones, lo que demuestra un compromiso continuo con el desarrollo rural.
El uso de socios de ejecución externos mantuvo al FIDA involucrado en Somalia durante los 30 años de suspensión de la financiación a través de proyectos financiados mediante donaciones.
