Como parte de esta política gubernamental con el objetivo de sustituir importaciones, el país altiplánico edificará hasta el año del Bicentenario de Bolivia (2025) unas 130 plantas industriales con una inversión de tres mil 600 millones de dólares.
Informó el vicetitular que el restante 20 por ciento, las de química básica, entrarán en funcionamiento en 2025.
Argumentó que ese tipo de emplazamiento “requiere más tiempo ya que contarán con tecnología europea y serán de características grandes a escala (de) Latinoamérica”.
Significó que del total de complejos en construcción por empresas públicas dependientes del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, al menos 50 corresponden al rubro de la manifactura y los alimentos.
Ratificó que hasta diciembre de 2023 el Gobierno nacional prevé inaugurar cuatro industrializadoras de papa, trigo, maíz y hoja de coca en los departamentos de La Paz, El Alto, Cochabamba y Santa Cruz.
Siles las calificó de superimportantes “porque es necesario que demos soberanía alimentaria a los bolivianos”.
El vicetitular de Políticas de Industrialización enumeró que los complejos de más inmediata inauguración serán la de almacenamiento y transformación de trigo, en el municipio paceño de Viacha; y la de acopio, almacenamiento y transformación de papa, en El Alto.
Subrayó que eso ocurrirá en noviembre del año en curso.
Añadió que las otras dos que serán inauguradas entre noviembre o diciembre, son la de transformación de hoja de coca y plantas endémicas, en Cochabamba; y la de almacenamiento y transformación de maíz de Pailón, en Santa Cruz.
Respecto a la de Viacha, significó que el Estado boliviano tendrá el “molino más grande” para la producción de harina, ingrediente de alta demanda en el occidente del país, territorio que más pan y otras masas consume.
Insistió la autoridad gubernamental en que la industrialización con sustitución de importaciones busca la independencia económica del país con un modelo que intervenga no sólo en los rubros de hidrocarburos y minerales, sino también en “mucha” manufactura.