Con una inversión de más de ochocientos mil pesos, este programa refuerza las acciones por impulsar la formación agrícola de las mujeres con enfoque en equidad e inclusión.
Cargill de México, en colaboración con la Fundación por una Nueva Solución, A.C. (EDUCAMPO), continúa sus esfuerzos en la implementación de programas de formación agrícola integral para que mujeres y sus familias mejoren sus condiciones de vida.
El programa Pro-Mujer Jalisco inició en septiembre del 2020, en el que participan 200 mujeres con 1,200 aves de corral, con el objetivo de empoderar a las mujeres agricultoras para la producción de huevos con gallinas libres de jaulas. La inversión de este programa asciende a más de ochocientos mil pesos, donación que se hizo por medio del fondo de recuperación Covid de la división Animal Nutrition & Health Global de Cargill.
“Las mujeres siempre han estado presentes en los agronegocios y Cargill reconoce el papel fundamental que desempeñan en el sector agrícola. Nuestra iniciativa, busca empoderar a las mujeres jaliscienses con mayores oportunidades para el desarrollo de sus habilidades y competencias”, señala Fernando Guareschi, presidente de Cargill de México.
Con la creación de grupos criadores de aves de corral, este programa busca generar el autoconsumo de huevos y nuevas fuentes de ingreso, para que con el paso del tiempo las mujeres participantes puedan constituirse socialmente y vender sus productos a grandes consumidores como restaurantes o tiendas de autoservicio.
El primer ciclo del programa Pro-Mujer Jalisco finaliza en septiembre 2022, debido a que las gallinas tienen un período de producción de 12 meses. Como parte de la inversión, se planean diversas alternativas de repoblamiento para reemplazar las gallinas y que estas granjas sigan siendo productivas, de tal forma que todos los grupos involucrados tengan la oportunidad de crecer el negocio.
Algunas acciones realizadas en el programa incluyen asesoría técnica en el acompañamiento en los corrales, generando avances en el proceso de diseño y operación de tecnologías de repoblamiento de aves, continuidad en la producción de aves, fortalecimiento de procesos de alimentación, vacunación, sanidad y registros.
Los resultados del programa Pro-Mujer son positivos y han derivado en el cuidado de 1,200 aves de corral, además de estar alineados con el objetivo de Cargill de mejorar las condiciones de las mujeres productoras y sus familias.
En su compromiso de nutrir al mundo de manera segura, responsable y sostenible, Cargill continúa sus esfuerzos para romper barreras y forjar un futuro más próspero e inclusivo en las comunidades donde tiene presencia.