Cultivada en Chile y disponible todo el año, la papaya andina es una fruta tropical muy aromática y prometedora que acaba de debutar en el mercado estadounidense.
Está repleta de la enzima de papaína, una sustancia conocida por ayudar a nuestro organismo a descomponer las proteínas en péptidos y aminoácidos.
La papaya andina es de color verde, madura de amarillo a naranja y se conoce comúnmente como papaya de montaña o papayuela. La pulpa blanca interior es comestible y suele cocinarse como un vegetal.
El presidente de Ecoripe Tropicals, Marc Holbik, dijo que la papaya, que pesa alrededor de medio kilo, es originaria de los Andes y se produce desde el sur de Colombia hasta el norte de Chile.
"Nuestra producción procede de la región de Coquimbo, en el norte de Chile, y cuenta con la certificación GLOBALG.A.P. Acabamos de introducirla en el mercado de Estados Unidos", explica Holbik.
Ecoripe envasa las papayas en cajas de 7 libras, con 24 a 28 frutas por contenedor y están disponibles desde las instalaciones certificadas PrimusGFS de la empresa en Miami, Florida.
"Tenemos la capacidad de traer productos frescos por vía aérea semanalmente a nuestras instalaciones de distribución certificadas PrimusGFS aquí en Medley, Florida, donde también tenemos una línea de más de 70 productos tropicales y exóticos", añadió el ejecutivo.
Aunque las papayas andinas gozan de una saludable demanda en el mercado nacional chileno, Ecoripe está explorando actualmente nuevos destinos para este producto, con especial interés en el público estadounidense.
Cómo disfrutar de una papaya andina
Aunque pueden comerse crudas, las papayas andinas se consumen principalmente cocidas para preservar su concentración de enzima papaína. También se pueden utilizar para hacer mermeladas, postres, batidos e infusiones.
