Neste concluyó con éxito su primera serie de pruebas de procesamiento de desechos plásticos licuados en su refinería de Porvoo en Finlandia. Después de iniciar la serie con su primera prueba a escala industrial con desechos plásticos licuados en 2020, Neste realizó pruebas adicionales en 2021.
En el transcurso de las pruebas, Neste pudo actualizar los desechos plásticos licuados soluciones para la producción de plástico y desarrollar capacidades a escala industrial para mejorar las materias primas recicladas.
Los ensayos allanan el camino para actividades continuas y comerciales
Neste se ha fijado el objetivo de procesar más de un millón de toneladas de residuos plásticos al año a partir de 2030. Para lograr ese objetivo, la compañía está avanzando en el reciclaje químico para convertir los desechos plásticos en una materia prima valiosa, fortaleciendo la circularidad. Por primera vez, Neste completó con éxito una prueba con 400 toneladas de desechos plásticos en 2020, lo que marcó un hito en el objetivo de Neste de impulsar una economía circular para reducir el agotamiento de los recursos fósiles.
En el transcurso de 2021, se realizaron pruebas adicionales para obtener más información sobre el procesamiento de desechos plásticos licuados, incluido el impacto de los procesos en las operaciones de la refinería. Además de eso, Neste también se centró en probar el concepto de cerrar el ciclo en la cadena de valor de los plásticos y hacer realidad la circularidad: las pruebas validan que Neste ya es capaz de procesar cantidades significativas de materias primas recicladas para productos petroquímicos.
Mientras se desarrollan las capacidades para convertir cantidades aún mayores de residuos plásticos en materias primas de mayor calidad para los usos petroquímicos.
“Existe un gran interés en las materias primas a partir de materias primas recicladas en el mercado de polímeros y productos químicos”, dice Mercedes Alonso, vicepresidenta ejecutiva de polímeros renovables y productos químicos de Neste. “Al procesar desechos plásticos licuados y convertirlos en recursos valiosos, no solo contribuimos a combatir el desafío de la contaminación plástica, sino que también proporcionamos a las empresas químicas y de polímeros los medios para avanzar en la economía circular. Para hacerlo a mayor escala en el futuro, también necesitaremos apoyo regulatorio. Por un lado, esto incluye la aceptación del reciclaje químico como una tecnología complementaria para lograr objetivos de reciclaje ambiciosos. Por otro lado, necesitamos objetivos igualmente ambiciosos para aumentar el uso de materiales más sostenibles”.
Economía circular para polímeros
Las pruebas de funcionamiento ya reflejan una cadena de valor que puede contribuir a procesar mayores volúmenes de desechos plásticos a su debido tiempo. Los desechos plásticos utilizados para las pruebas de funcionamiento comprendían solo desechos posconsumo mixtos que, de otro modo, serían difíciles de reciclar .
“En total, hemos procesado unas 800 toneladas de residuos plásticos licuados en nuestras refinerías de Finlandia. Con las últimas pruebas en Porvoo, estamos sentando las bases para reemplazar las materias primas a base de petróleo crudo con residuos plásticos licuados y fortalecer la circularidad junto con nuestros clientes. Sobre la base de las pruebas exitosas, podemos concluir que los desechos plásticos licuados son una alternativa viable para la materia prima fósil. Para obtener la confianza necesaria para la producción a mayor escala, aún se necesitan más pruebas con volúmenes más grandes, y las ejecuciones con mayores volúmenes continuarán en 2022”, dice Markku Korvenranta, vicepresidente ejecutivo de productos petrolíferos de Neste.
Las 800 toneladas de residuos plásticos que se han procesado hasta ahora equivalen a la cantidad que genera una pequeña ciudad de la UE* en un año. El resultado de las pruebas ya se está abriendo camino en el ciclo de los polímeros como materia prima para nuevos productos poliméricos, con las mismas propiedades y la misma calidad que los basados en materias primas fósiles, lo que hace que la materia prima sea adecuada incluso para el envasado de alimentos o aplicaciones sanitarias.
*) Basado en cifras de Eurostat y suponiendo un tamaño de ciudad de 50.000 habitantes.
