Uno de los principales objetivos de los alimentos orgánicos es proteger el medio ambiente. Las principales características son no usar pesticidas, fertilizantes químicos o sustancias sintéticas que dañan el medio ambiente. De acuerdo con la legislación brasileña, para que la comida sea considerada orgánica, el proceso de producción debe incluir el uso responsable del suelo, el agua, el aire y otros recursos naturales, respetando las relaciones sociales y culturales.
Sin embargo, a pesar de todos los beneficios aparentes, muchos consumidores en Brasil aún no ven beneficios a la compra de alimentos y bebidas orgánicas. Según un informe de Mintel sólo el 9% de los consumidores optaría por la compra orgánica en productos listo para beber de jugo, llegando a 11% entre los mayores de 55 años.
Una posible razón para el bajo interés es el alto precio de los alimentos ecológicos. En general, la investigación de Mintel dice que los consumidores brasileños están altamente influenciados por precio en la compra de productos alimenticios y bebidas, poniendo los productos orgánicos como últimos en su lista de compras. Según el informe de Mintel de 2014, los precios bajos son, con mucho, la principal prioridad para los consumidores brasileños, con un 78% de ellos que lo pone como una razón clave para la selección de una comida y bebida minorista sobre otra.
En el lado positivo, las empresas en Brasil están invirtiendo más en innovación de nuevos productos dentro de las categorías de alimentos y bebidas orgánicas. De acuerdo con la base de datos de Mintel Global de Nuevos Productos (GNPD), el 3,5% de todos los lanzamientos en 2014 afirmó ser orgánico, lo que representa un incremento del 95% desde 2011, cuando el 1,8% de los lanzamientos afirmó ser orgánico.
Para las empresas de alimentos y bebidas orgánicas, hubo mensajes claros sobre los beneficios de los productos orgánicos para los consumidores y para el medio ambiente. Esta es clave para justificar el alto costo y será clave para incrementar el crecimiento en el futuro. Las marcas podrían organizar actividades tales como seminarios, talleres, cursos y eventos de degustación de productos orgánicos para educar a los consumidores sobre el universo de la producción ecológica. El embalaje pone de relieve las principales características de los productos orgánicos y la disponibilidad del personal de la tienda para responder a las preguntas de los consumidores, así como la promoción de los productos también son alternativas que podrían explorarse.
Según el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento (MAPA), el área de los productos orgánicos en Brasil es de alrededor de 750.000 hectáreas, con más de 10.000 productores y aproximadamente 13.000 unidades de producción. Brasil, con sus vastos campos, diferentes tipos de suelo y el clima, así como una increíble biodiversidad, es sin duda uno de los países con mayor potencial de crecimiento en la producción orgánica.
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