Forman parte de la línea de productos 100% origen vegetal, se ofrecen en las variedades leche y blanco.
La preferencia por propuestas gastronómicas en base a ingredientes de origen vegetal, es un estilo de vida que gana público en todo el mundo. Chile no es la excepción. Las opciones veganas crecen junto a la inquietud de los consumidores por el cuidado de nuestro planeta. La sustentabilidad da un paso al frente pero no implica renunciar al sabor.
Engrandeciendo esta tendencia, Belcolade, marca de Puratos, lanza en Chile dos nuevos productos que distinguen a la empresa especialista en la tradición del chocolate belga. Se trata de Belcolade Selección Plant Based M, una alternativa vegetal al chocolate de leche, y Belcolade Plant Based W, la opción al chocolate blanco.
“Sabemos que cada vez más consumidores están buscando productos que cumplan con los más altos niveles de calidad y sabor y que, al mismo tiempo, sintonicen con el entusiasmo por una alimentación plant based. La nueva línea vegana de Puratos, saludable y sustentable, llegó para dar respuesta a esta demanda en auge”, señala María José Rubiño, Product Manager Pastelería de Puratos de Chile.
Versatilidad y textura ideal
Los atributos de los dos lanzamientos hablan por sí mismos. Belcolade Selection M. Plant-Based Cacao-trace es un chocolate en base a plantas de textura cremosa y sabor a leche, elaborado con 46% de cacao. Es libre de lácteos y frutos secos. Por lo tanto, resulta una opción viable para quienes padecen alergias a estos ingredientes. Además, para su fabricación se emplea 100% manteca de cacao y 100% vainilla natural.
En tanto, el Belcolade Selection W. Plant-Based Cacao-Trace es una deliciosa alternativa vegetal al chocolate blanco y contiene 36% de cacao. Como lo indica su nombre, es vegano y no posee alergenos.
Los dos son productos sustentables: cuentan con el valioso certificado Cacao-Trace. Quienes conocen la empresa sabrán que este sello habla de una forma de trabajo que genera un círculo virtuoso que va del productor al consumidor con un ida y vuelta. Mejora día a día las condiciones de vida de los agricultores de cacao y sus familias y, al mismo tiempo, logra la más alta calidad para este chocolate que está hecho en Bélgica.
“Ambos lanzamientos son fáciles de utilizar y tienen una enorme versatilidad de aplicación en pastelería tradicional y vegana. Logran excelentes resultados de sabor y textura”, destaca Rubiño.