Comprender la relación entre la innovación y la Agronomía requiere el conocimiento del significado y el desarrollo de ambos. El primero está relacionado con los procesos de cambio asociados a factores como el aumento de la demanda, en términos de calidad, diseño o las necesidades de adaptación, de los consumidores, la mayor competencia y la aplicación de los avances tecnológicos para aumentar la productividad. Cualquiera que sea el caso, el único requisito es la implementación del cambio.
La agronomía nació en el siglo 19, un producto de las crecientes necesidades del mercado y de los productores asociados con el progreso y la difusión del conocimiento científico. Esto provocó un cambio radical en los modelos productivos. Mediante la implementación de avances tecnológicos que constantemente aumentan la producción, teniendo en cuenta los factores que la producción y las técnicas para su regulación para obtener la máxima producción o más conveniente, la conservación de la fertilidad de los suelos y el medio ambiente se hace posible. Ambos procesos a lo largo de la historia se han interconectado.
La innovación surge de la necesidad, y en este caso, la creciente población actúa como una fuerza que presiona sobre la producción. Estos sistemas de producción se ven obligados a hacer cambios, ya sean radicales o incrementales, para dar cabida a las necesidades nutricionales de mercado y aumentar su nivel de crecimiento.
En sus inicios, la ciencia agronómica implicaba una separación de los preceptos establecidos de las ciencias tradicionales. Las innovaciones que surgieron en este campo eran radicales; crearon nuevos productos y procesos que no podían ser entendidos como la evolución natural de los productos existentes sino, más bien, los productos y procesos que se consideran las respuestas a las crecientes necesidades de las ciudades grandes.
Los aumentos en la rentabilidad y la competitividad de la ganadería y en los productos agrícolas para la modernización de las explotaciones y la inversión en tecnologías en un mercado saturado de ofertas son los medios por los que algunos productores han multiplicado su rendimiento y mejoraron su calidad de producción. En el caso de la agricultura, las innovaciones se han producido no sólo en las etapas de la productividad, sino también en las etapas de distribución y comercialización.
En el caso de las semillas, cultivos de plantas, lo que permite ampliar la producción y mejorar la calidad, se puede ajustar de acuerdo a las exigencias específicas del clima y el suelo. El mejoramiento genético hace que el sector agrario sea más competitivo en el logro de los rendimientos similares a los de las regiones fuertemente posicionadas con las que es necesario competir. En este caso, hay muchas posiciones sobre los transgénicos debido a su uso indiscriminado y la creación de nuevas especies de plantas, que a su vez puede tener un impacto negativo en el consumo humano, animal y el ecosistema.
