Los sistemas de producción convencionales están basados en la utilización intensiva de recursos ambientales, humanos y tecnológicos; por ello la agricultura sustentable, puede ser una solución potencial para los problemas que provoca este tipo de utilización,
pues plantea reducir el daño ambiental, mantener la productividad, promover el crecimiento económico a corto y largo plazo; y mantener la estabilidad y calidad de vida en las comunidades.
La agricultura sustentable es un modo de producción que intenta obtener producciones sostenidas en el largo plazo; a través del diseño de sistemas de producción agropecuarios que utilicen tecnologías y normas de manejo que conserven y/o mejoren la base física y la capacidad sustentadora del agrosistema (Venegas y Siau, 1994).
Además de la preocupación por conservar y manejar adecuadamente los recursos, surge la necesidad de obtener alimentos libres de contaminantes; por lo cual, es necesario establecer políticas y acciones que aseguren la inocuidad de los productos y que garanticen la calidad e higiene para el beneficio de los consumidores, tal como menciona Martha Elena Domínguez Hernández en la Revista Iberoamericana.
El aprovechamiento sustentable en sistemas agropecuarios, protege los valores de la comunidad, suministra ganancias al productor y proporciona más beneficios que la simple explotación del ambiente, asimismo, ya que permite renovar los recursos tanto naturales como económicos para las generaciones siguientes (Gold, 1999).
La FAO (1991) define a la agricultura sustentable como “el manejo y conservación de los recursos naturales y la orientación de cambios tecnológicos e institucionales de manera de asegurar la satisfacción de las necesidades humanas de forma continuada para la presente y futuras generaciones. Tal desarrollo sustentable conserva el suelo, el agua, y recursos genéticos animales y vegetales; no degrada al medio ambiente; es técnicamente apropiado, económicamente viable y socialmente aceptable".
Con esto en mente, la producción ganadera de Ahuazotepec, permite proponer un sistema sustentable que combine menores costos de alimentación y alojamiento a través de pastoreo controlado, la obtención de forrajes de alta calidad y un manejo integrado de plagas y enfermedades.
Utilización de agroquímicos, fertilizantes y medicamentos: sólo deberán utilizarse agroquímicos, cuando sea necesario y bajo ninguna circunstancia bajo un calendario de aplicación, a excepción de los medicamentos. Si se hace necesario su uso, solo serán aquellos autorizados por la Comisión Intersecretarial para el Control de Proceso y Uso de Plaguicidas, Fertilizantes y Sustancias Tóxicas (COFEPRIS) y la SAGARPA.
Buenas Prácticas de Manejo y Buenas Prácticas de Higiene para la Producción de Ovinos Registros: Los predios deben registrar las actividades realizadas dentro del sistema con el fin de contar con la información necesaria y detallada sobre cada fase del proceso productivo; dicha información permite la aplicación correcta y auditable de un sistema de BPA, BPM y BPH. Entre los registros de mayor importancia en un sistema de producción ovina se encuentran los referentes al predio, el manejo de praderas, identificación y manejo del ganado, la aplicación de tratamientos médicos y la capacitación del personal.
La implementación de buenas prácticas agrícolas, de manejo e higiene bajo condiciones de sustentabilidad en los sistemas de producción ovina de Ahuazotepec, Pue., permitirán el incremento en la rentabilidad del sistema a través del mejoramiento de los procesos y el manejo de recursos.
