Dario Cecchinni, "el mejor carnicero del mundo", con un documental en Netflix, compra su carne a la carnicería Viñals de la Illa Diagonal.
La carne, quizás uno de los alimentos que más nos conectan a nuestro lado primitivo, tiene la belleza de lo simple.
A la buena carne no le hace falta nada para brillar, y pocas cosas más satisfactorias para un carnívoro que un corte de carne de calidad al que no le haga falta nada más que sal y pimienta para convertirse en uno de los mejores bocados del mundo.
Los barceloneses carnívoros tienen ahora la suerte de poder decir que este bocado se encuentra muy cerca de sus casas, y que la mejor carnicería del mundo compra su carne en una carnicería de Barcelona.
Se trata de la carnicería Viñals, que puede decir con orgullo que vende la mejor carne del mundo. Y lo puede hacer porque Dario Cecchini, considerado el mejor carnicero del mundo (o, al menos, el más famoso), compra el producto para su local en el pueblo de Panzano in Chianti (Toscana, Italia), a estos artesanos de la carne barceloneses.
La mejor carne del mundo se produce en Girona, se vende en Barcelona y se come en Italia
En una paradoja curiosa, Viñals, una carnicería poco conocida de Barcelona, suple de carne a Cecchini, una auténtica estrella italiana que tiene dedicado un capítulo en Chef’s Table, la colección de documentales sobre gastronomía de Netflix.
La aparición del macellaio (carnicero, en italiano) en la serie de Netflix y su título honorífico de mejor carnicero del mundo, un título inventado pero efectivo que desde Estados Unidos ha recibido el italiano, ha puesto a la carnicería de este pequeño pueblo de la Toscana en una órbita mundial.
Cecchini, todo un personaje que canta ópera mientras atiende, se ha convertido en una estrella que ya tiene una sede de su maccelleria en Dubai, donde sirve su icónico y casi único plato de la carta, la bistecca a la fiorentina, un filete de lomo de buey con el hueso en forma de «T» cocinado a la plancha.
Pero como de hecho cuenta en el documental que lo ha llevado a la fama, la famosa bistecca de Cecchini no sale de la praderas italianas, sino de vacas de Girona cuya carne Viñals, una carnicería pequeña de Barcelona, le vende a la tienda italiana.
Viñals es una saga de carniceros que nació en Mataró hace más de un siglo, en 1906. La cuarta generación de carniceros de la familia ha hecho que animales que pastan en libertad en Lleida, Girona y la Cerdanya produzcan carne que viaja por todo el mundo, pero que tiene un único punto de venta en Catalunya: la carnicería Viñals del centro comercial l’Illa Diagonal.
Aquí, la carnicería evoluciona, y se convierte en un restaurante anexo a la tienda, donde por un pequeño extra uno puede dejarse cocinar lo que haya comprado en la parada. Así, un bistec de ternera de la Cerdanya, una hamburguesa o un chuletón madurado de rubia gallega se puede comer al momento cocinada en un Josper y acompañada de patatas a la brasa o verduras y de diferentes salsas.
De esta manera para probar la mejor carne del la mejor carne del mundo no hace falta viajar ni a Italia ni a Dubai, sino, simplemente, caminar los pocos pasos que separan la carnicería de Viñals de su restaurante, un restaurante que sirve, creemos poder decir, una de las mejores carnes del mundo.
