En cuanto a la caída del consumo de leche en Argentina, el director ejecutivo del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina, Jorge Giraudo destacó que, “se debe fundamentalmente al proceso devaluatorio y la alta inflación”.
Durante lo que va de 2024, desde enero hasta mayo, la producción de leche en Argentina tuvo una fuerte caída del 14,5%. Si bien se estima una recuperación para el mes de junio, la industria nacional se diferenció fuertemente del crecimiento que hubo a nivel mundial.
“La producción de leche cayó mucho en Argentina en estos primeros 5 meses del año, el 14% se debe al efecto de sequía del año pasado y el inicio de este año con serios problemas de alta temperatura y humedad”, comentó Jorge Giraudo. “Esto generó una caída fuerte, lo cual va a contramano de lo que está ocurriendo en el mundo con el nivel de crecimiento de la producción mundial”, agregó.
Durante el mes de junio se observa una leve recuperación de la producción
Posteriormente, Giraudo planteó: “Por suerte se está empezando a revertir la situación ya en el mes de junio, se empezó a recuperar un poco la producción”. Luego, manifestó que, “la caída del consumo fue independiente de la cuestión de la producción”.
A qué se debe la caída del consumo de leche
“La caída del consumo se debe fundamentalmente al proceso devaluatorio y la alta inflación, que generó un desacople de precios al consumidor en el mercado interno”, sostuvo el entrevistado. “Los ingresos de la clase media, que es el que más consume, no se habían recuperado por una suba muy fuerte en los precios”, complementó.
Por otro lado, el director ejecutivo del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina señaló: “En diciembre cuando se produce la devaluación, muchos de los precios se establecieron pensando en un dólar por encima de $2.000, ahora empieza a frenarse la suba de precios y empieza a darse un acople con el incremento de los ingresos de la gente”.
A modo de cierre, Giraudo dijo que, “veníamos durante todo 2023 con caídas en calidad de consumo y no tanto en cantidad, es decir, un consumo más de productos básicos y menos de valor agregado”.