La hipertensión es el principal factor de riesgo de muerte en el mundo, y afecta tanto a hombres como a mujeres. Aumenta el riesgo de infarto de miocardio, accidentes cerebro vasculares e insuficiencia renal.
También puede causar ceguera e insuficiencia cardíaca. El riesgo de desarrollar cualquiera de estas complicaciones es mayor, si no se controla la hipertensión (es decir, si no es menor de 140/90), y si existen otros factores de riesgo tales como el tabaco, la obesidad y la diabetes.
Aunque la presión arterial por encima de 140/90 mmHg afecta al 30% de la población adulta, una tercera parte desconoce su enfermedad. Uno de cada tres personas que se está tratando por hipertensión no consigue mantener su presión arterial por debajo del límite de 140/90.
La hipertensión se puede prevenir si se reduce el consumo de sal, se sigue una dieta saludable, se evita el consumo nocivo de alcohol, y se mantiene un estilo de vida físicamente activo y un peso corporal saludable. Puede ser tratada de manera exitosa si se siguen las recomendaciones médicas y si se usan medicamentos seguros. Varios países de las Américas han avanzado en el control de la hipertensión y han logrado reducciones en la mortalidad por enfermedades cardiovasculares en su población.
En el Instituto de Nutrición de Centro América y Panamá (INCAP), se ha abordado el problema que representa la hipertensión para las comunidades de los países miembros desarrollando, implementando y evaluando modelos de promoción de salud, detección y manejo de la hipertensión. Inicialmente, se desarrolló y evalúo el Programa Corazón Sano y Feliz a través de un estudio piloto en la comunidad de Mixco, Guatemala.
Este programa incluye un componente de detección de riesgo cardiovascular y manejo clínico de la hipertensión, y un componente de educación para pacientes. La implementación de esta intervención en Mixco, logró cambios significativos en los niveles de conocimiento, conductas y niveles de presión arterial en los pacientes participantes. Posteriormente, el modelo de Corazón Sano y Feliz fue ampliado a comunidades de San José Costa Rica y Chiapas, México, en las cuales, también, se obtuvieron resultados satisfactorios.
Más recientemente, investigadores del INCAP, junto a investigadores de otros centros de excelencia en enfermedades crónicas en el mundo evaluaron el potencial de promotores de Salud en la identificación de individuos de alto riesgo de enfermedades cardiovasculares. El estudio en Guatemala, se implementó en la comunidad de Santiago Atitlán, demostrando el potencial que tienen los promotores de salud para desempeñar funciones de detección de la hipertensión y sensibilización de las comunidades sobre la amenaza que representa la hipertensión.
Es importante que los países de Centroamérica y República Dominicana continúen con los esfuerzos para prevenir, detectar y manejar la hipertensión arterial y factores de riesgo asociados a las enfermedades no transmisibles.