El presidente del Comité del Kiwi, Carlos Cruzat comento sobre el estado actual de la industria del kiwi chileno, indicando que estiman un 14% menos de fruta respecto al año pasado. “Vamos a tener menos fruta”.
Indicó que la baja en la producción de fruta se debe a factores climáticos “tuvimos un muy buen invierno en las horas frío, brotación bastante normal, pero tuvimos efectos de la PSA, algunos granizos y problemas en la polinización; eso hizo que bajáramos el potencial que teníamos. Por lo tanto, estamos con un menor número de frutos colgando en la planta, pero por otro lado tenemos una fruta de mejor calibre”.
Menos fruta mejor calidad
En cuanto a las condiciones del Kiwi chileno, Cruzat señaló “tuvimos un muy buen invierno con un desarrollo y expresión de yemas. Sumado a ello un verano caluroso, sin dificultades de riego, lo que permitió que la fruta creciera ordenadamente, pero se suma a que tenemos una menor cantidad de fruta y la planta tiene mayor capacidad de ir creando peso dentro de la propia fruta”.
Indicó que el año 2019 proyectaron la superficie que tendría el cultivo al año 2028, considerando los arranques y las nuevas plantaciones. “Y esa proyección ha sido bastante certera, y proyectamos que íbamos a tener un descenso hasta una meseta, que efectivamente correspondía al año pasado y al actual; por lo tanto, en lo que viene ahora es un acenso paulatino de la producción que van a entregar las nuevas plantaciones.
Con las nuevas plantaciones probablemente lleguemos a tener 200 mil toneladas al año 2030”.
El escenario de un -14% se suma a una baja del orden del 20% en los kiwis en Nueva Zelanda, producto de una helada muy grande en octubre y un retraso de las cosechas. Por lo tanto, hacia muchos años que no había una producción tan baja en kiwis verdes en el hemisferio sur y eso probablemente va a generar un mercado muy activo.
Kiwi en los mercados
Respecto a la situación actual, Cruzat indicó que el mercado internación al se encuentra con mucha fruta proveniente de Grecia. “El año pasado fue especialmente lento”.
Agregó que a nivel internacional el año anterior fue diferente, ya que se inició la guerra entre Rusia y Ucrania, situación que retraso todos los despachos. “Estaba atorada la logística mundial y por lo tanto no era fácil obtener contenedores. Hoy estamos en una situación distinta al año pasado, pero el año pasado fue un año muy excepcional. Este año hemos tenido cierta normalidad en cuanto a la disponibilidad de contenedores, de la salida de barcos, de los mercados al recibir la fruta”.
A juicio del presidente del Comité del Kiwi los mercados se están moviendo con normalidad y a ritmos tradicionales.
Pero mencionó que el escenario actual de una baja en un 14% se suma a un descenso del orden del 20% en los kiwis en Nueva Zelanda, “producto de una helada muy grande en octubre y un retraso de las cosechas. Por lo tanto, hace muchos años que no había una producción tan baja en kiwis verdes en el hemisferio sur y eso probablemente va a generar un mercado muy activo”.
Mirada hacia el futuro
En base a la proyección del Comité de Kiwi, Cruzat comentó “esperamos que de aquí al 2030, deberíamos llegar a 200 mil toneladas. Estamos en un proceso de renovación de las plantaciones, en zonas con mejores condiciones climáticas, con plantaciones más modernas”.
Cruzat proyecta que el próximo año y los siguientes, si se mantienen los ritmos de plantación es muy posible llegar a las 200 mil toneladas. Esto dado los huertos más modernos, que contemplan un diseño más bajo para realizar la cosecha, con un sistema de conducción y formación de los brazos que permite una mayor productividad.
Añade que las plantaciones modernas contemplan una distancia más cerca entre plantas, “hoy puede haber distancia entre 4 a 3,5m x 2 metros en la hilera.
Por lo que el cultivo ha ido respondiendo a una densificación de partir produciendo antes y con machos más productivo, con una expectativa de productividad exportable como piso de 40 toneladas”.