Cuando se trata de frutas de verano pequeñas pero poderosas, destacan los arándanos.
¿Hay algo más sencillo y delicioso? Disfrútelos a puñados o agréguelos a batidos, yogures, cereales integrales, panqueques, postres... ¡lo que sea!
Grace O, la visionaria fundadora de FoodTrients, defiende la idea de la comida como medicina y comparte información sobre cómo la comida puede ayudarnos a envejecer mejor y vivir una vida más saludable. Este mes Grace se centra en los beneficios para la salud de los arándanos.
Al reflexionar sobre sus raíces, Grace comparte que "al crecer en Filipinas, los arándanos eran un placer poco común, por lo que aprecio la abundancia de bayas frescas disponibles aquí en California.
Originarios de América del Norte y ahora ampliamente cultivados en Chile y Nueva Zelanda, los arándanos son un 'superalimento' indiscutible. ¡Ocupan un lugar destacado en cualquier lista de alimentos que beneficien el cuerpo y la mente!" Entonces, ¿qué pueden hacer por ti estas pequeñas maravillas azules? Ellos ofrecen:
Comida para el cerebro
Los compuestos de los arándanos llamados polifenoles ayudan a mantener las señales entre las neuronas del cerebro. Mantener esas señales ayuda con la memoria, especialmente a medida que envejecemos. Los estudios en animales han demostrado que el consumo diario de arándanos puede retardar las alteraciones de la coordinación y la función motora asociadas con el envejecimiento.
Rico en antioxidantes
Los compuestos como la antocianina, un flavonoide responsable de dar a alimentos como los arándanos, los arándanos y la col lombarda sus tonos profundos, abundan en los arándanos. Probablemente ya hayas oído que son antioxidantes y antiinflamatorios. La inflamación y el estrés oxidativo contribuyen a muchas enfermedades mortales, como el Alzheimer, el Parkinson, la diabetes, las enfermedades cardíacas y la artritis.
Mantener huesos sanos
Los arándanos contienen buenas cantidades de hierro, fósforo, calcio, magnesio, manganeso, zinc y vitamina K, que contribuyen a desarrollar y mantener la estructura y la fuerza de los huesos. La ingesta adecuada de vitamina K mejora la absorción de calcio y puede reducir la pérdida de calcio.
Presión sanguínea baja
Mantener una dieta baja en sodio contribuye en gran medida a reducir la presión arterial. Los arándanos contienen potasio, calcio y magnesio, y se ha descubierto que todos ellos reducen la presión arterial de forma natural.
Mejorar la salud cardíaca
Según un estudio de la Escuela de Salud Pública de Harvard, el consumo regular de antocianinas, que abundan en los arándanos, puede reducir el riesgo de ataque cardíaco en un 32% en mujeres jóvenes y de mediana edad. El contenido de fibra, potasio, ácido fólico, vitamina C, vitamina B6 y fitonutrientes de los arándanos favorece la salud del corazón. La vitamina B6 y el folato previenen la acumulación de un compuesto conocido como homocisteína, que puede dañar los vasos sanguíneos.
Luchar contra las arrugas
Solo una taza de arándanos proporciona el 24% de tu necesidad diaria de vitamina C. El colágeno, el sistema de soporte de la piel, depende de la vitamina C para ayudar a prevenir y reparar los daños causados por el sol, la contaminación y el humo. La vitamina C también promueve la capacidad del colágeno para suavizar las arrugas y mejorar la textura general de la piel.
El programa de vida saludable de Grace se basa en nueve “FoodTrients” que desafían la edad y que ella incorpora en sus recetas y artículos. Ellos son: antiinflamatorio, antioxidante, belleza, desintoxicación, prevención de enfermedades, salud intestinal, refuerzo inmunológico, mente y fuerza.
