La intoxicación alimentaria ocasionada por bacterias del género Salmonella es una de las zoonosis de mayor prevalencia en países desarrollados y una de las principales causas de enfermedades gastrointestinales en el hombre. El número estimado de infecciones humanas por Salmonella spp es superior a 93 800 000 casos anuales, con 155 000 muertes al año en todo el mundo.
En América Latina, Asia y África, la incidencia reportada de salmonelosis es de 200 a 500 casos por 100 000 habitantes por año. La transmisión de Salmonella spp de persona a persona es poco frecuente, por lo que se considera que los alimentos son la principal fuente de exposición humana. Se estima que el 95% de las infecciones están asociadas con alimentos de origen animal.
En 23 de los estudios, Salmonella spp fue resistente a más de un antibiótico, incluyendo ácido nalidíxico, estreptomicina, tetraciclina, cloranfenicol, ampicilina, trimetoprim/sulfametoxazol, gentamicina, ciprofloxacina y cefalosporinas. Los aislamientos de Salmonella spp obtenidos de alimentos de origen animal para consumo humano en los países analizados en la Universidad Nacional de Córdoba., Argentina presentan con frecuencia resistencia a múltiples antibióticos.
A raíz de lo mencionado existen ideas falsas sobre los antibióticos y la carne, aquí nombramos algunos de ellos.
1. 80% de los antibióticos se utilizan en los animales.
La gran mayoría de los diferentes tipos de antibióticos se utilizan ya sea en las personas y en los animales. La FDA ha establecido una guía para que los veterinarios dispongan de prescripciones de antibióticos utilizados para fines de prevención y tratamiento de enfermedades.
2. El uso de antibióticos de los animales es el principal contribuyente a la resistencia.
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la mayoría de las infecciones resistentes a los antibióticos humana se adquieren en los hospitales y otros centros de salud residenciales.
3. No hay supervisión del uso de antibióticos en los animales.
La supervisión reguladora y veterinaria del uso de antibióticos es particularmente estricta. La FDA ha ampliado el papel a los veterinarios en la administración de antibióticos administrados a los animales.
4. Hay antibióticos en nuestra carne.
Los antibióticos deben ser eliminados del sistema de un animal antes de que pueda ser procesada como comida. Antes del sacrificio se realiza una retirada del antibiótico, es decir que durante un tiempo determinado a los animales no se les da antibióticos u otros medicamentos. La USDA realiza exámenes de residuos, y más de 99% de los productos cárnicos dan prueba negativa.
5. Los antibióticos se utilizan principalmente para la promoción del crecimiento en animales
En 2012, la FDA pidió a los productores de ganados y aves eliminar gradualmente el uso de antibióticos o médicamente importantes para estimular el crecimiento. La industria de la carne se puso de acuerdo con este cambio.
6. Superbichos comunes en los productos cárnicos.
Practicar los métodos básicos de manejo seguro en la cocina, como el lavado de manos, separar la carne cruda de alimentos listos para comer y cocinar a la temperatura adecuada es el proceso ideal para evitar enfermedades, y siempre dependerá de las practicas de cada persona.
Se aconseja utilizar un termómetro para medir la precisión de la carne para saber si se ha cocinado a una temperatura que se considera seguro para el consumo (por lo menos 140-145 grados Fahrenheit). Los termómetros también aseguran que se ha preparado la carne para satisfacer sus gustos y preferencias.
Otra de las recomendaciones importantes es el almacenamiento de las sobras, es importante:
- Descartar cualquier carne que se haya dejado a temperatura ambiente por más de 2 horas - 30 minutos si la carne se deja fuera en un día de campo o en un automóvil caliente.
- Divida las cantidades grandes de sobras en recipientes pequeños y poco profundos y coloque inmediatamente en el refrigerador o el congelador para el enfriamiento rápido y así evitar el crecimiento bacteriano.
- Use las sobras cocidas dentro de 3 - 4 días.
- Recalentar las sobras a 165 ° F.
- Prestar atención al cocer despojos de carne, por lo general cambia el color de rojo brillante a marrón rojizo, esto es un indicio de que el producto está empezando a estropearse. El producto es generalmente seguro para comer, si se prepara correctamente. Pero, ante la duda, siempre es preferible llevarlo a la basura.
Es importante que más países en América Latina realicen y publiquen estudios sobre la resistencia de Salmonella spp para establecer y monitorear estrategias de control adecuadas.